El Departamento de Justicia de Estados Unidos instruyó a todas las agencias federales a reducir los servicios multilingües que ofrecen, en línea con la política impulsada por la administración de Donald Trump para establecer el inglés como idioma oficial del país.
A través de un memorando interno, el Departamento justificó la medida afirmando que limitar los programas dirigidos a personas con dominio limitado del inglés permitirá agilizar los procesos gubernamentales, mejorar la claridad institucional y reducir costos operativos.
“La iniciativa no busca únicamente recuperar una tradición, sino implementar una estrategia orientada al futuro que facilite la integración social y económica, al brindar a todos los residentes la oportunidad de aprender y adoptar el inglés como camino hacia el sueño americano”, señala el documento firmado por la secretaria de Justicia, Pam Bondi.
Bondi agregó que, al declarar el inglés como idioma oficial, el país refuerza su unidad nacional y optimiza la eficiencia operativa. Además, afirmó que se proporcionarán herramientas prácticas para que las agencias encuentren un equilibrio entre este nuevo mandato y sus responsabilidades clave.
El presidente Trump firmó en marzo un decreto que oficializa el inglés como el idioma nacional. En cumplimiento de esta orden, el Departamento de Justicia indicó que las agencias deberán revisar sus programas, subvenciones y políticas para determinar cuáles pueden operar exclusivamente en inglés, en beneficio del público general.
En casos donde se mantengan servicios multiculturales, las agencias deberán incluir un mensaje claro que aclare que el inglés es el idioma oficial del gobierno. El memorando también recomendó considerar el uso de inteligencia artificial para reducir gastos en traducción y destinar esos recursos a iniciativas que promuevan el aprendizaje y la asimilación del inglés.
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