Corea del Sur y Estados Unidos iniciarán esta semana una nueva ronda de conversaciones de alto nivel centradas en temas comerciales clave, incluidos los aranceles impuestos por la Administración del presidente Donald Trump.
Según fuentes cercanas al proceso, las negociaciones contarán no solo con la participación de los responsables de comercio de ambos países, sino también con la presencia de sus ministros de Finanzas, en línea con una propuesta inicial de la Casa Blanca. Aunque la agenda y la fecha exacta aún se están concretando, todo indica que el encuentro se celebrará el jueves 24.
El objetivo central de Seúl es lograr la reducción o eliminación de los aranceles estadounidenses que afectan a productos coreanos estratégicos, como automóviles y semiconductores. Sin embargo, el Gobierno también se prepara para discutir el reparto de costes de la defensa conjunta, ante la posibilidad de que Washington vuelva a exigir un mayor aporte financiero por parte de Corea del Sur.
En paralelo, el ministro de Industria, Comercio y Energía, Ahn Duk Geun, se refirió al proyecto de desarrollo de gas natural licuado en el estado de Alaska, una iniciativa que Estados Unidos ha impulsado con fuerza. Ahn aseguró que la propuesta está siendo considerada, aunque subrayó que el interés de Seúl no está ligado a posibles concesiones arancelarias, sino a fortalecer la seguridad energética nacional.
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