Cinco soldados israelíes perdieron la vida y otros 14 resultaron heridos —dos de ellos de gravedad— en un ataque ocurrido en el norte de Gaza, según informó el martes el ejército de Israel. Mientras tanto, autoridades sanitarias palestinas reportaron al menos 18 muertos a causa de bombardeos israelíes en distintas zonas del enclave.
El ataque se produjo mientras el primer ministro Benjamin Netanyahu se encontraba en Washington para reunirse con el presidente estadounidense, Donald Trump, con el objetivo de avanzar en un posible acuerdo de alto el fuego que detenga temporalmente los combates. Aunque las conversaciones no arrojaron anuncios inmediatos, ambas partes señalaron que existen señales de progreso.
Según un alto funcionario de seguridad israelí, milicianos detonaron explosivos contra los soldados durante una operación en Beit Hanoun, al norte de Gaza, un área de intenso conflicto desde el inicio de la guerra. Las fuerzas israelíes también fueron atacadas con disparos mientras intentaban evacuar a los heridos. El funcionario solicitó el anonimato al no estar autorizado para hablar con la prensa.
Con esta nueva jornada de violencia, el número de soldados israelíes muertos desde el inicio de la ofensiva contra Hamás en octubre de 2023 asciende a 888.
Desde el lado palestino, el portavoz del brazo armado de Hamás, Abu Obeida, calificó el ataque en Beit Hanoun como un «nuevo golpe» al ejército israelí, al que describió como “débil”, y advirtió que mantener tropas en Gaza sería “la decisión más insensata que Netanyahu podría tomar”.
La reciente muerte de los soldados podría aumentar la presión interna sobre el gobierno israelí para alcanzar un acuerdo. Encuestas en el país muestran un respaldo significativo a un alto el fuego que ponga fin a la guerra.
En tanto, la ofensiva aérea israelí continuó este martes. Según fuentes médicas del Hospital Nasser, uno de los bombardeos alcanzó tiendas improvisadas que albergaban desplazados en Jan Yunis, en el sur de Gaza, dejando al menos cuatro muertos. Otro ataque en la misma ciudad cobró la vida de una familia entera: padre, madre y dos hijos. En el centro de Gaza, un ataque en Nuseirat mató a 10 personas e hirió a más de 70, de acuerdo con el Hospital Awda.
El ejército israelí no se pronunció de inmediato sobre estos hechos, aunque sostiene que Hamás es responsable de las víctimas civiles al operar desde zonas densamente pobladas.
La violencia ha dejado al sistema de salud gazatí al borde del colapso. La Media Luna Roja Palestina informó que la Clínica Médica Al-Zaytoun, en Ciudad de Gaza, cerró sus puertas tras verse afectada por los bombardeos, dejando a miles de personas sin acceso inmediato a atención médica y vacunas para niños.
La visita de Netanyahu a Washington se produce semanas después de una breve pero intensa guerra entre Israel e Irán, y podría añadir urgencia a los esfuerzos diplomáticos. Funcionarios de la Casa Blanca presionan para que se concrete un acuerdo que incluya una tregua de 60 días, la entrega de ayuda humanitaria masiva y la liberación de al menos parte de los 50 rehenes que aún se cree están en manos de Hamás, de los cuales unos 20 seguirían con vida.
Un alto funcionario israelí, también bajo condición de anonimato, aseguró que entre el 80% y el 90% de los puntos del acuerdo ya han sido resueltos, y que un entendimiento final podría lograrse en cuestión de días. No obstante, una de las principales diferencias sigue siendo el desenlace de la guerra: Hamás exige un cese definitivo de las hostilidades y la retirada total de las fuerzas israelíes, mientras que Netanyahu insiste en continuar hasta lograr la rendición, el desarme y el exilio del grupo islamista, condiciones que Hamás rechaza.
El conflicto comenzó el 7 de octubre de 2023, cuando combatientes de Hamás lanzaron un ataque en el sur de Israel, matando a unas 1.200 personas y tomando a otras 251 como rehenes. Desde entonces, Israel ha desplegado una ofensiva militar que, según el Ministerio de Salud de Gaza, ha causado más de 57.000 muertes, más de la mitad de ellas mujeres y niños.
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