Lo que parecía un vuelo rutinario desde Minneapolis hacia Madison, Wisconsin, terminó convirtiéndose en una historia insólita para los pasajeros de Delta Airlines el pasado sábado, cuando dos palomas se colaron a bordo y obligaron a retrasar la salida en dos ocasiones.
Según confirmó la aerolínea, las aves lograron ingresar a la aeronave antes del despegue. Un pasajero, Tom Caw, relató a medios locales que el avión tuvo que regresar dos veces a la puerta de embarque para lidiar con las inesperadas intrusas. La primera fue capturada por personal de tierra; la segunda, por un pasajero que usó su chaqueta como improvisada red, según se ve en un video grabado durante el incidente.
“El piloto contó que, al notificar a la torre de control sobre el regreso por una paloma, el operador le dijo que era la primera vez que escuchaba algo así. El piloto respondió: ‘Para mí es la segunda, la primera fue hace media hora’”, relató Caw con humor.
Delta informó que el vuelo se retrasó 56 minutos debido al inusual percance. “Agradecemos las acciones cuidadosas de nuestro equipo y de los pasajeros que ayudaron a retirar de forma segura a las aves antes del despegue. Pedimos disculpas por las molestias ocasionadas”, señaló la compañía en un comunicado.
Pero las palomas no fueron los únicos animales que alteraron los planes de Delta ese fin de semana largo por el Día de los Caídos. El lunes por la noche, un vuelo entre Detroit y Los Ángeles tuvo que desviarse a Minneapolis luego de que un perro se enfermara a bordo.
Afortunadamente, un veterinario que viajaba en el avión prestó asistencia al animal antes de que la tripulación decidiera realizar el aterrizaje de emergencia. Un equipo médico esperaba al can en la puerta de embarque. Este incidente provocó un retraso de dos horas y media.
“La seguridad de nuestros clientes y del personal es nuestra máxima prioridad”, expresó una portavoz de Delta. “Por eso, el vuelo 694 fue desviado a MSP para asegurar que una mascota enferma recibiera la atención adecuada”.
Leave a comment