Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) ordenaron este martes la evacuación inmediata del Aeropuerto Internacional de Saná, en Yemen, intensificando así la tensión en un conflicto regional que enfrenta al Estado hebreo con el movimiento rebelde hutí, respaldado por Irán.
La advertencia, difundida por el portavoz del Ejército israelí en árabe, Avichay Adraee, a través de su cuenta en la red social X, instó a la población civil a abandonar la zona aeroportuaria para evitar riesgos. “Les instamos a evacuar el área del aeropuerto internacional de Saná inmediatamente. No hacerlo los expone al peligro”, señaló Adraee, reiterando la urgencia en un video publicado junto al mensaje.
La amenaza israelí se produce un día después de que sus fuerzas aéreas bombardearan el estratégico puerto de Al Hudeida, en respuesta al impacto de un misil hutí en las inmediaciones del aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv el pasado domingo. La escalada confirma el endurecimiento del conflicto, que ha ido extendiéndose más allá de la Franja de Gaza.
De acuerdo con un comunicado oficial de las IDF, el operativo del lunes involucró a unos 20 aviones de combate que lanzaron alrededor de 50 municiones contra “decenas de infraestructuras del régimen terrorista Houthi” en la costa yemení. Los objetivos incluían almacenes logísticos, centros de mando e instalaciones operativas vinculadas con los insurgentes.
Uno de los blancos principales fue la fábrica de hormigón Bajil, ubicada al este de Hodeida, señalada por Israel como un punto clave en la construcción de túneles y estructuras militares subterráneas utilizadas por los hutíes. También fueron atacadas instalaciones dentro del puerto marítimo, que según el ejército israelí, representa una fuente vital de ingresos para los rebeldes y funciona como centro logístico para el suministro de armas iraníes.
Desde octubre de 2023, cuando estalló la guerra en Gaza, el movimiento hutí ha intensificado sus ataques contra Israel en lo que Tel Aviv denuncia como una campaña regional para desestabilizar el orden en Medio Oriente y sabotear el tráfico marítimo internacional. En ese periodo, los hutíes han lanzado decenas de misiles y drones suicidas tanto contra territorio israelí como contra embarcaciones comerciales en el mar Rojo y el océano Arábigo.
Durante el último fin de semana, los rebeldes chiitas reivindicaron el lanzamiento de al menos cinco misiles dirigidos a Israel. Cuatro fueron interceptados por el sistema antimisiles Cúpula de Hierro, mientras que uno impactó cerca del aeropuerto Ben Gurión, dejando a cuatro personas heridas.
Mientras tanto, el alto mando militar israelí sigue evaluando la posibilidad de ampliar su ofensiva terrestre en Gaza. Según el mismo comunicado castrense, el jefe del Estado Mayor, Eyal Zamir, junto con el director del Shin Bet, Ronen Bar, y otros oficiales, se encuentran ultimando detalles para extender la Operación “Carros de Gedeón”.
El reciente ataque aéreo marca la primera incursión directa de Israel en Yemen desde que reanudó sus operaciones en Gaza a mediados de marzo, subrayando la dimensión regional que ha tomado el conflicto. La participación activa de los hutíes, una milicia chiita con fuerte respaldo iraní, añade una nueva capa de complejidad y amenaza la ya frágil estabilidad de Medio Oriente.
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